El manatí africano: Características de la especie

El manatí africano (Trichechus senegalensis) es una de las tres especies de manatíes pertenecientes a la familia Trichechidae. Este mamífero marino forma parte, junto con sus parientes el manatí del Caribe, el manatí del Amazonas y el dugongo, del orden de los Sirenia (o sirenios).

En esta entrada exploraremos las características distintivas y principales de esta fascinante criatura que habita las costas y sistemas fluviales de África Occidental.

Tabla de Contenidos:

Características del manatí de África:

nddmdm

Clasificación: El manatí africano o Trichechus senegalensis como nombre cientifico, es una de las tres especies de manatíes (junto con el del Caribe y el del Amazonas) que componen la familia Trichechidae, y forma parte del orden Sirenia de los mamíferos marinos.
Anatomía: Posee un cuerpo voluminoso y fusiforme con una piel gruesa de color que varía del gris oscuro al marrón. Se distingue de su primo, el dugongo, por su cola ancha, de forma redondeada o de espátula (similar a un remo). Su labio superior es grande y hendido, cubierto de cerdas táctiles muy sensibles, que utiliza para manipular y arrancar vegetación. A diferencia de otros sirenios, el manatí africano carece de uñas en sus aletas pectorales.
Hábitat y Distribución: Este mamífero acuático habita en una variedad de ecosistemas a lo largo de África Occidental, con una distribución que se extiende por 21 países. Prefiere las aguas costeras poco profundas, pero es adaptable a entornos de agua dulce, salobre y salada. Se encuentra en ríos, lagos, estuarios, lagunas costeras y, en ocasiones, en el mar abierto a lo largo de la plataforma continental. Su rango abarca desde el Río Senegal hasta Angola.
Alimentación: El manatí africano es principalmente herbívoro. Su dieta consiste en una amplia variedad de plantas acuáticas, incluyendo hierbas ribereñas, hojas, algas y, ocasionalmente, pastos marinos en ambientes costeros. Debido a su flexibilidad de hábitat, consume mucha más vegetación dulceacuícola que otros sirenios. Como todos los manatíes, son pastoreadores lentos y no consumen presas animales.
Reproducción y ciclo de vida: Los manatíes africanos tienen un ciclo reproductivo lento. Las hembras alcanzan la madurez sexual alrededor de los 3 a 5 años. Dan a luz a una única cría tras un periodo de gestación que dura aproximadamente 13 meses. La cría es altamente dependiente de la madre y permanece a su lado durante uno o dos años. El intervalo entre partos de una hembra suele ser de 2 a 5 años.
Tamaño y peso: El manatí africano es de tamaño considerable, alcanzando hasta 4 metros de longitud y un peso que puede superar los 1,500 kg.
Población y Amenazas: Aunque no se tienen cifras precisas debido a su naturaleza esquiva y hábitat disperso, la especie está clasificada como Vulnerable por la UICN. La principal amenaza es la caza ilegal (por su carne y aceite), la pérdida de hábitat por el desarrollo de represas y la contaminación, y la captura incidental en artes de pesca.

Familiares cercanos:

En esta sección se encuentran los familiares cercanos del manatí. Cada uno cuenta con su propia entrada de descripción a la cual puede acceder solo presionando sobre cada imágen: